Peto, tordo, Pepe (Symphodus tinca)
Cómo es:
El Peto pertenece a la familia de Labridae. Son peces de pequeño y mediano tamaño de esqueleto óseo pertenecientes al orden de los Perciformes. Los lábridos son peces de forma más o menos alargada y comprimida. Como la mayoría de peces tienen el cuerpo cubierto de escamas de tipo cicloide, generalmente grandes y bien visibles y de superficie lisa. Estas son finas, flexibles y se encuentran imbricadas como tejas y en algunas especies pueden llegar incluso hasta la cabeza. Su boca es algo protráctil y armada con numerosos dientes de tipo canino o incisivos. Otros rasgos característicos de los lábridos son sus enormes labios gruesos y carnosos, y su única aleta dorsal formada por radios espinosos y duros en su parte anterior, y blandos en la posterior. Las aletas pélvicas presentan un radio espinoso y cinco blandos y se hallan situadas justo debajo de las pectorales, que no presenta ningún radio espinoso. Su cola puede ser redondeada o algo truncada.
Symphodus tinca se caracteriza por presentar un cuerpo comprimido, alargado y alto. El morro es largo y puntiagudo y esta rematado por unos labios carnosos muy característicos. Detrás de estos labios se encuentran una hilera de fuertes dientes caninos. La coloración es dicromática no permanente; quiere decir: los machos únicamente presenta una coloración más vistosa en época de reproducción y fuera de esta época, las diferencias entre macho y hembras son mínimas y bastante parecidas. Ambos sexos presentan una máscara facial negra que le atraviesa el hocico y una mancha negra mediana en el pedúnculo caudal.
Cómo vive:
Symphodus tinca es una especie endémica del mar mediterráneo aunque también se pueden observar ejemplares en las costas Atlánticas europeas (Portugal y Marruecos). Está presente también en el mar Negro. Es una especie relativamente abundante en el Mar Menor, sobre todo en los meses estivales.
Los lábridos son mesófagos de actividad diurna y su alimentación está compuesta básicamente de pequeños invertebrados marinos de los cuales destacan gusanos marinos, crustáceos (como pequeños cangrejos y camarones), equinodermos e incluso moluscos de concha dura. Los labios carnosos y bien irrigados de Symphodus tinca, sensible a cualquier movimiento, ejerce de maquinara táctil para encontrar a estas diminutas presas.
Se trata de una especie costera (típicamente litoral), y puede habitar desde la superficie hasta unos 50 metros de profundidad. Ocupa fondos rocosos con algas y praderas de fanerógamas. En el mar Menor es común cerca de las islas, en puertos y escolleras y en praderas de Cymodocea nodosa y Caulerpa prolifera.
Algunas curiosidades:
Durante los meses de primavera y comienzos del verano se produce la reproducción y es cuando los grandes machos lucen unos colores muy llamativos para atraer a las hembras. A diferencia de otras especies de su género, el macho construye, cuida y vigila un solo nido durante la época de freza.
El peto, con sus 40 cm máximos, es el lábrido más grande del Mediterráneo. Aunque tiene primos tropicales que lo triplican en tamaño, bien puede presumir de tener la medalla de oro en la categoría de pesos pesados del mare nostrum y del Mar Menor.
Es una especie cada vez más abundante en la laguna costera del mar Menor y comparte hábitat con otros miembros de su familia como Symphodus ocellatus, Symphodus roissali o Symphodus cinereus.